Lloyd Cole, el hombre que nunca fue una rock star

por | 21 septiembre 2016 | Reportajes

Si el historiador marxista británico, Eric Hobsbawm llamaba al siglo XX “el más corto de la Historia” y lo dio por finiquitado en 1989, de igual manera podríamos afirmar que la década de los 80 empezó realmente en 1977. La eclosión del punk vio nacer a multitud de bandas que volvieron a hacer de Gran Bretaña el epicentro de la música y la rebeldía juvenil.

lloyd-cole-valencia

A pesar de esto, parece que los 80 han acabado engullidos por toda una serie de estereotipos. Así han quedado como una década presidida por los videoclips, las canciones horteras o el pop comercial que llenaba estadios. Pero, los 80 fueron de una extraordinaria complejidad, con multitud de estilos que acabaron abriendo nuevas fronteras musicales, como Lloyd Cole, entre otr@s, se encargaría de demostrar.

En este contexto, un joven inquieto y devorador de literatura europea y estadounidense, crea en 1984 en la ciudad de Glasgow un grupo llamado Lloyd Cole & The Commotions, con un magnífico álbum debut, Rattlesnakes. Lloyd Cole dejó claras sus credenciales con canciones de guitarras claras, arreglos de teclado discretos y unas letras románticas, que describen las complejidades de las relaciones sentimentales.

Si su primer álbum fue la revelación del año, los siguientes no le fueron a la zaga. Así, su segundo  LP, Easy Pieces, contenía un ramillete de esplendidas canciones como «Brand new friend», «Cut me down», o la pegadiza «Lost Weekend». Con este segundo disco Lloyd Cole llegó al público español, pero fue su tercer álbum Mainstream el que significó su entrada directa a las listas de éxitos. Temas como «Jennifer, she said», «Mister malcontent», o «Hey Rusty» convierten a la banda británica en una de las más importantes de finales de la década, y consolidaron a Cole como un autor en plena madurez creativa.

En 1990, y dando por finiquitado a The Commotions, el cantante británico empezó una carrera en solitario, plagada de altibajos, con unos inicios en los que consiguió mantener sus nuevas canciones en las listas de éxitos, pero con una repercusión mediática cada vez menor. Álbumes como el homónimo Lloyd Cole, o Don’t Get Weird On Me Babe de 1991, que con canciones como Tell Your Sister o She’s A Girl And I’m A Man lo convierten en para much@s su mejor obra.

Después de unos años en los que acaba rompiendo con su discográfica, Lloyd Cole da otro giro a su carrera, convirtiéndose en un cantante más intimista, y por tanto, menos interesado en las ventas y más en unas cuidadosas composiciones que le confieren un poso folk-rock, cercano a su adorado Leonard Cohen. Obras excelentes como Antidepressant o Standards lo confirman.

Su nueva gira lo acerca a nuestra ciudad, donde hará un repaso acústico del conjunto de su carrera, a la espera de la publicación de una caja que comprenderá lo que fueron sus cuatro primeros discos en solitario. Una cita ineludible el próximo domingo 25 de septiembre en Loco Club, para ver a en directo a un cantante que estuvo a un paso de ser una estrella del rock y optó por ser un músico en continua experimentación. Eso sí, manteniendo esa  presencia  intimista y retraída de siempre.

Foto: Kim Frank

Artículos relacionados

Pin It on Pinterest