Muy poca gente puede presumir de un currículum tan fascinante como Chuck Prophet. El músico estadounidense ha acabado por convertirse en uno de esos artistas cuya obra siempre es sinónimo de calidad y fascinación.
El repertorio de sus canciones parece poseer dos caras: una luminosa que te lleva a una preciosa playa del Pacífico, y otra calurosamente oscura, capaz de dejarte en mitad del desierto de Arizona con la única compañía de tu sudor y tus preocupaciones. Además estamos ante un hombre que ha llegado a colaborar con Jonathan Richman, Aimee Mann o Lucinda Williams, lo cual es indicativo de su importancia dentro de la escena musical estadounidense.
A mediados de los años 80 Chuck Prophet se unió al grupo Green On Red; junto a Dan Stuart creó algunas de las mejores canciones de aquello que se denominó Nuevo Rock Americano, y que englobó a varias bandas (The Long Ryders, The Dream Syndicate, R.E.M.) que con su rock se distanciaron de la música comercial imperante en la época. Álbumes como “Gas Food Lodging” (Enigma, 1985) o “Here Comes The Snakes” (Mercury, 1988) siguen enamorando hoy en día gracias a unos temas que respiran la influencia de Neil Young, The Rolling Stones y, sobretodo, Flying Burrito Brothers; maravillas sonoras del calibre de “Morning Blue” o “Broken Radio” ayudaron a poner las bases de una escena indie que explotaría en la siguiente década.
Su carrera en solitario se inició con el disco “Brother Aldo” (Fire Records, 1990), un trabajo en el que, si bien podemos observar que sigue la senda marcada por músicos de la talla de Ray Davies, Tom Petty o Alex Chilton, también deja entrever una personalidad única: el country rock de “Look Both Ways”, la aridez melancólica de “Scarecrow” o los ritmos blues del tema que da título a este delicioso debut.
Sus siguientes discos fueron cimentando un discurso musical que se movía entre el puro rock americano y pequeños experimentos psicodélicos, además coincidieron con la explosión de la americana music, aquella escena donde grupos como Wilco, The Jayhawks o Whiskeytown renovaron la escena alternativa del país con un regreso a las raíces folk de Johnny Cash o Gram Parsons. Dentro de este panorama, las obras del músico californiano fueron recibidas con entusiasmo: trabajos del calibre de “Homemade Blood” (Cooking Vinyl Records, 1997) o “The Hurting Business” (Cooking Vinyl Records, 2000) contienen un buen número de certeros dardos sonoros (“Credit”, “New Year´s Day”, “It Won´t Be Long”).
El próximo 2 de noviembre Chuck Prophet actuará en el 16 Toneladas Rock Club de Valencia para presentar su último trabajo: “Night Surfer” (Yep Roc Records, 2014), producido por Paul Kolderie (que ha trabajado con Pixies o Uncle Tupelo) y el gran Brad Jones, gurú genial del pop cuya sabiduría infinita se ha dejado ver en discos de Cotton Mather, Matthew Sweet o Els Pets. Este nuevo disco ha destacado por ser otro gran ejercicio de rock clásico lleno de energía: “Felony Glamour”, “They Don´t Know About Me and You”, “Ford Econoline”, o “Wish Me Luck”.