Havalina se han convertido en uno de los grupos relevantes del rock español en los últimos años. La formación compuesta por Manuel Cabezalí, Jaime Olmedo y Javier Couceiro ha ido perfeccionando su discurso musical hasta convertir las canciones en fascinantes ejercicios rebosantes de emoción y fiereza.
En el interior de discos como Las hojas secas (2010) y H (2012) nos encontramos con puras descargas de adrenalina sonora (“Desierto”, “La Antártida empieza aquí”), pero también sombríos puñetazos llenos de conmovedora literatura (“Mamut” o “La ley de la gravedad”).
Islas de cemento (2015), es un nuevo trabajo que guarda composiciones con letras que han sido, en su mayoría, adaptadas del libro de poemas “Manual para conductores borrachos” de J.J. Cabezalí; de esta forma nos encontramos con un torbellino de sentimientos que nos golpea en los más profundo de nuestras almas gracias al rock bárbaro de “Cementerio de coches” y “Un reloj de pulsera con la esfera rota” (capaces de recordarnos a los mejores momentos de Manic Street Preachers o a los primeros Radiohead), aunque también hay sitio para la arrolladora intensidad que despliegan temas como “Donde” o “Cristales rotos sobre el asfalto mojado” (esta última cercana a los universos sonoros de Elbow o lo suecos Kent), y, sobretodo, para un estremecedor “Ulmo” que parece mirar hacia los Smashing Pumpkins más apasionados.
El próximo viernes 16 de octubre actuarán en 16 Toneladas Club Rock junto a Wave At The Sun.
Foto: Iris Banegas