Los flamencos rosa de John Waters irrumpen en el ‘Telón bizarro’ de Rambleta . El centro cultural abre una nueva sesión de cine acompañada de performance el 20 de febrero con ‘Pink Flamingos’, de John Waters
No deja de ser curioso que en 1972, el mismo año que un cineasta de Baltimore estrenara su obra más “cult”, Javier Aguirre publicara su libro manifiesto del “anticine”. Como el director vasco, John Waters desafío también a una industria que fabrica sueños, crea tanto como destruye sus propios mitos y esculpe fábulas legendarias bajo cielos normalmente artificiales. No, hay otro cine posible. Basta un presupuesto ínfimo, un equipo básico y una troupe de ‘espontáneos’ que impúdicamente se exhiba ante la cámara y, sobre todo, esa sobredosis de pasión e ingenio que caracteriza a John Waters.
Curtido en cines de barrio, serie B y cine de género, hizo sus primeras obras pensando que nadie osaría exhibirlas. Pero cuando una película inenarrable como Pink Flamingos vio la luz, se transformó rápidamente en algo más que un hecho o una agresión, fue durante meses la estrella absoluta de las midnight movies, ese cine de culto que pasaban determinados anfiteatros en el filo de la medianoche. Se trataba de un film desvergonzado, extrañamente glamouroso e indecente a la vez, definitivamente sórdido y desternillante.
Divine es su estrella, alter ego de Harris Glenn Milstead que travestido se transformaba. Le encantaba acudir de paisano a las sesiones de ésta, su obra magna, y en la escena del desenlace, la más sucia jamás filmada, susurrarle al oído del espectador que tuviese al lado: “That’s me!” (¡Soy yo!). Llegado el momento de rodar dicha escena, Waters tenía dudas de que Divine se atreviera. “¿Vas a hacerlo?” y el actor sencillamente dijo: “Por supuesto, lo pone en el guión”. Esa misma noche llamó por teléfono a un médico contándole lo que un amigo suyo muy loco había hecho y éste le dijo que sólo éste corría peligro de pillar una triquinosis.
El próximo jueves 20 de febrero, el Telón Bizarro de Rambleta hará honor a su nombre programando este clásico del cine trash. Todo envuelto en un espectáculo amenizado por el maestro de ceremonias Vedra Ponte, la Rocky Horror Band y las incomodadoras. Habrá un sorteo de premios y participará el crítico Daniel Gascó, quien contará diversas anécdotas curiosas sobre el film. Antes de la película, se proyectará un corto inolvidable y extremo del gran Tex Avery.